MIGA viene de A-MIGA
EL ORIGEN DE MIGA
El oficio de mi familia
Mi nombre es Laura y soy la artesana detrás de cada pieza MIGA. La producción artesanal es el oficio de mis padres (y antes lo fue de mi abuelo) y a mí siempre me ha gustado fabricar cosas con mis propias manos. Crecí entre hebillas y remaches y me encantaba bucear entre los restos de fornituras de temporadas anteriores.
En mi casa el dinero se usaba para viajar. Salíamos a la aventura con algún rumbo, pero sin reservas ni muchos planes. Viví pocos atascos porque mis padres siempre prefirieron hacer caminos más largos pero “ver mundo”. Puede ser que de allí me venga lo de ser un culo inquieto y haberme mudado muchas veces. Para mí todos los lugares tienen su encanto y disfruto buscándoselo.
MIGA viene de A-MIGA. Durante años viví en Brasil, en una gran ciudad del sur llamada Porto Alegre. Allí las mujeres se llaman así las unas a las otras. Me costó hacerme a esta costumbre, pero cuando me quedé embarazada y conocí a mis comadres, a mis «amigas de barriga», el «¿cómo estás, miga?» empezó a fluir. Con ellas compartí importantes tardes de puerperio, bizcocho y desahogos. Con ellas empecé a soñar esta marca que aún no tenía nombre.
Una marca sostenible
Para mí la sostenibilidad no solo tiene que ver con el respeto con el entorno, sino con las personas que forman parte del proceso productivo, con la valorización de nuestros talentos y con las condiciones materiales que permiten la conciliación de nuestra vida laboral y personal.
En 2019 volví a España junto a mi familia con la intención de que nuestro hijo pudiese conocer los lugares en los que yo me crié. Esta idea, en tiempos de pandemia, nos trajo no solo a Cantabria como a Cahecho, el pueblo lebaniego de 40 habitantes donde nació mi padre.
Es el lugar al que veníamos los fines de semana cuando era pequeña y donde siempre pensé jubilarme. Las circunstancias hicieron que pudiera adelantar 30 años la experiencia de vivir aquí.
Desde Cahecho he conseguido dedicarle tiempo y mucho esfuerzo a pensar MIGA, un proyecto que llevaba rondándome años, pero que nunca había conseguido priorizar.
MIGA es colaboración entre mujeres, trabajo artesanal y respeto por las personas y el entorno.
el valle de liébana
El lugar más bonito del mundo
Vivir en el campo te da espacio y más tiempo para crear, y el Valle de Liébana es uno de los más inspiradores que yo he pisado nunca. Como dijo una vez mi amigo Iván: “debe haber lugares tan bonitos como este en el mundo, pero más es imposible”.
MIGA es la marca que he creado a partir de mi herencia familiar, de mis vivencias alrededor del mundo y de los valores que hoy me construyen como persona: la colaboración entre mujeres, la puesta en valor del trabajo artesanal y el respeto por las personas y el entorno.
MIGA es el resultado de mi herencia familiar, de mis vivencias alrededor del mundo y de los valores que me construyen como persona.